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Transformación digital en la sostenibilidad: La importancia y urgencia en nuestros tiempos

Transformación Digital en Sostenibilidad

Las señales son muy claras, nuestro planeta está enfrentando desafíos críticos y nos está exigiendo responder de manera seria y oportuna. El cambio climático, los desastres naturales, los riesgos ambientales y la creciente presión sobre los recursos naturales están impulsando la sostenibilidad como un pilar estratégico en las organizaciones.

En este sentido, la transformación digital de los procesos constituye un aspecto clave en la ejecución exitosa de los cambios a realizar en un muy breve tiempo. Según el Foro Económico Mundial, para el 2022 se digitalizará más del 60% del PIB mundial, y se estima que el 70% del nuevo valor creado en la próxima década se basará en plataformas digitales.

Es aquí donde el concepto de sostenibilidad digital toma relevancia. Mediante este enfoque holístico, una empresa puede impulsar su gestión sostenible a través de inversiones en tecnología.

¿Cómo las Tecnologías Digitales Promueven la Sostenibilidad? 

Mientras aumenta la presión por una mayor responsabilidad ambiental por parte de las comunidades, las tecnologías digitales como la inteligencia artificial (IA), el aprendizaje automático (Machine Learning), el Internet de las Cosas (IoT) y el almacenamiento en la nube, están ayudando a alcanzar los objetivos de sostenibilidad de diversas maneras.

Una de las claves para aportar a un mundo más verde desde la tecnología está en la anticipación y proactividad, y eso tiene que ver mucho con la predicción. Las herramientas digitales permiten superar barreras como la dispersión geográfica y realizar un efectivo seguimiento de KPI’s para identificar comportamientos y adelantarse a posibles incumplimientos. En un escenario en el que las regulaciones ambientales están en constante cambio, la facultad de mantenerse a la vanguardia de manera ágil es primordial.

Lograr estas predicciones requiere la capacidad de desarrollar modelos analíticos, que se alimenten y retroalimenten constantemente (vayan aprendiendo) para alcanzar una alta precisión y logren entregar información en tiempo real.

Sostenibilidad en el Centro del Negocio

Incluir la sostenibilidad en el modelo de negocio se ha convertido en un asunto de “adaptarse o morir”. Empresas de todo el mundo prefieren adquirir productos y servicios de compañías que puedan demostrar una operación sostenible y que, consecuentemente, les ayuden a “ecologizar” sus propias cadenas de suministros.

Al mismo tiempo, los inversionistas están trasladando sus inversiones hacia compañías con calificaciones más altas en Medio Ambiente, Social y Gobierno Corporativo (ESG), y no es de extrañar que estas organizaciones destaquen y superen a sus pares en la industria.

Estos cambios obligan a las empresas a transformarse para asegurar su viabilidad en el largo plazo. La sostenibilidad exige hoy urgencia y va más allá de comunicar los impactos de la organización en el medio ambiente y las comunidades, implica incorporar la sostenibilidad en el centro del negocio.

La tecnología y la digitalización son herramientas y procesos fundamentales para lograr este fin. Integrarlas en todas las áreas y operaciones de una compañía permitirá cambiar la forma en la que opera y se ofrecer valor a los clientes y a los inversionistas.

Mirando Hacia el Futuro

La transformación digital y la sostenibilidad son factores muy promisorios para el futuro de los negocios y no existe duda que serán incorporados como elementos claves en éstos, la única duda es cuándo, pero ya vamos tarde.

Asimismo, la autoridad y los fiscalizadores también están haciendo lo suyo. Estamos observando en algunos países que la autoridad se ha adelantado a las iniciativas de las empresas, incorporando tecnología para mejorar los niveles de control y facilitar las auditorías. Las empresas que no incorporen tecnologías se encontrarán en gran desventaja para enfrentar los procesos de fiscalización.

Como vemos, la digitalización de la sostenibilidad es un proceso que ya comenzó, será una bola de nieve de exigencias locales, regionales y mundiales para la que debemos estar preparados. Las próximas señales la veremos en la COP-26 a realizarse en Glasgow.

Estamos convencidos de que la evolución hacia un modelo de crecimiento sostenible de largo plazo no es factible si no se la considera como un pilar estratégico del negocio ni se avanza en la transformación digital; por lo que ésta ya no es una opción, sino que una necesidad.

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